La ex gran hermana lleva más de dos décadas en la televisión, sus comienzos fueron algo tortuosos y si algo ha aprendido es que nadie es imprescindible.
Belén empezó su andadura relatando todo lo que sucedió en su relación con Jesulín y cómo estaba siendo su separación pues había una hija muy pequeña en común, y después narraba los conflictos diarios que había por ello. A lo largo de los años, cientos de entrevistas han salido en primera plana. Era un tema candente y que atraía a mucho público por la sencillez de su protagonista.
La cadena que regenta Vasile la ha mantenido en este tiempo como una colaboradora de los programa clave, era obvio que si contaba su historia, la audiencia subía. Sin embargo, conforme pasaba el tiempo, se daba cuenta que lo que ella decía le afectaba a su hija e intentaba callarse, aunque en muchas ocasiones no podía reprimirse.
Fue Andrea quien al tener 18 años suplicó a su progenitora que mantuviese el tema en el olvido y callase al respecto, y Belén lo ha cumplido a rajatabla pese a los intentos de su programa de que emitiese algún comentario de la información que salía sobre los Janeiro – Campanario.
Claramente la de Paracuellos sabe que pierde fuerza mediática si no articula palabra del tema, y se rumorea que el dueño de la cadena está en conversaciones con la familia residente en Ambiciones para que sean parte de uno de los concursos o den entrevistas para Telecinco.
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Hasta el momento, y pese a las cuantiosas ofertas que han recibido se han negado a ello, aunque está claro que desde producción lo seguirán intentando pues esta familia lleva años sin querer dar declaraciones, y sería muy jugoso obtener la primicia, les reportaría a todas las partes muchos beneficios. ¿Se sentirá Belén traicionada por la decisión tomada desde dirección? Habrá que esperar para saberlo.
