La madre de la ex gran hermana Adara ha hecho unas declaraciones para un famoso magazine que no ha pasado inadvertidas para nadie.
Hace escasos días se hacían públicas las aclaraciones a la vida pasada de Elena en una revista nacional que los colaboradores de Sálvame no han tardado en comentar, y sobre todo Mila, pues se siente reflejada en muchas de las palabras y vivencias que se cuentan. Rodríguez consiguió cierta popularidad tras defender a su hija en GH y los productores la tuvieron en cuenta como nuevo rostro para su siguiente reality.
Cuando le propusieron participar en el concurso de supervivencia, jamás pensó que iba a terminar relatando sus momentos más duros de su vida personal, y es que entre sollozos confesó que había sido víctima de maltrato. Todos quedaron conmocionados porque no tenían idea de eso y la propia Adara confirmó que era verdad, y que cuando ella era pequeña sufrieron situaciones muy duras.
Ahora, una vez finalizado el concurso, ha querido aclarar el tema mediante una entrevista en la que declaró que:
Yo era una niña y tenía hijos pequeños. Vivía con miedo y, cuando a lo largo de tu vida eso ha estado siempre presente, acabas perdonando. Lo normalizas.
Los malos instantes eran parte de su día a día, bofetones, gritos y demás, eran lo normal en su casa; y es que la entonces pareja sentimental de la madre de Aitor, tenía un temperamento airado y feroz.
Vivieron momentos muy tensos, hasta que un día la gota colmó el vaso y se armó de valor para pedir ayuda y es que la situación era insostenible, y aprovechando que:
La Guardia Civil vino a mi casa, me fui con mi hija al médico y conté lo que había pasado, que aquel señor dio una bofetada a su hijo y otra a mi hija.
Aunque el resto de familiares han negado los hechos, diciendo que para ellos no había indicios de malos tratos, Elena cuenta que aunque ella misma no quiso tomarlo en serio al principio, se dio cuenta que era algo que no podía seguir ocurriendo y añade que:
Habría que preguntar a sus hijos si no recuerdan las tortas que les daba a ellos.
Finalmente, la abuela de Martín ha querido pronunciarse acerca del padre de su nieto, ya que ambos han sido parte del mismo concurso, y ha adelantado que su situación ha cambiado para bien pues antes:
Cualquier cosa que saliera de mi boca, no se la tomaba bien, al final me acercaba a él de una forma sumisa.
Esto ahora no sucede ya que, tienen más confianza y han conseguido limar asperezas durante su estancia en los Cayos Cochinos. La superviviente ha sabido superar cada obstáculo que le ha puesto a la vida y sortear los baches del camino para realzarse como una mujer realizada en todos los aspectos de la vida.