Parece que la familia Flores ha vuelto con intención de quedarse en la pantalla pequeña durante un largo periodo, pues desde que Antonio David concursara en GH VIP 7, todo ha sido cosechar éxitos para ellos.
Después de unos años alejados de los focos, el ex guardia civil reapareció ante los medios participando en un reality de convivencia para sorpresa de muchos, que ya pensaban en que se había retirado por completo del mundo público.
Una estrategia infalible
Pero nada más alejado de la realidad, pues no sólo él ha conseguido fortalecerse como uno de los rostros más conocidos del momento, y molestar a su ex pareja, si no que logró que su hija mayor también se convirtiera en personaje público con su paso por Supervivientes 2020.
Ambos están siendo nombrados en todos los espacios de Telecinco ya que, el clan Jurado sigue vendiendo mucho y es un tema que atrae a la audiencia, por lo que ambos están realizando muchas apariciones en los platós, para desagrado de Rocío Carrasco con quien mantienen una afrenta personal.
Por si fuera poco, la joven Rocío Flores está en una espléndido momento tanto laboral como personalmente, pues logró deshacerse de 16 kilogramos de más que venía arrastrando, y está más contenta que nunca.
Tanto es así que, la malagueña dice estar muy enamorada de su pareja, Manuel Bedmnar, a quién adora, y que debido a que tiene una buena estabilidad económica tras su paso por la cadena de Paolo Vasile, no tendría inconveniente en formar una familia pronto.
Al menos así se lo ha relatado su amigo Jorge Pérez, quien ha comentado que fue la propia Rocío quien se lo confesó en su viaje para conocer Castilla La Mancha, pues aunque no tienen planes de contraer matrimonio, él los ve bastante seguros de lo que implica tener hijos.