María Patiño ha entrevistado en Viernes Deluxe este pasado viernes a Carlota Corredera, la cual examina el choque mediático que ha causado las declaraciones de Rocío Carrasco en su docu-reality. María Patiño aprovecha la oportunidad para declararse culpable y reconocer que su actitud hacia Rocío Carrasco ha sido equivocada.
El testimonio de Rocío Carrasco ha sido cuestionado por María Patiño en diversas ocasiones, hecho que reconoce la propia periodista. Tras pasar el tiempo y finalizar todos los capítulos de la docuserie, María Patiño cambia de opinión. Notablemente emocionada, la periodista aprovecha la entrevista de Carlota Corredera y dice lo que siente.
Con emoción, María Patiño reconoce que ha criticado a Rocío Carrasco y se ha equivocado
María Patiño comienza diciendo:
“Soy consciente de mis carencias y de mis errores”
y seguidamente se dirige a Carlota Corredera diciendo:
“La televisión es una reflejo de la sociedad por lo tanto no pidamos que no exista lo que, por desgracia, también existe en la calle. Quiero dar unas explicaciones, sobre todo a ti”
Cada vez más emocionada, María Patiño continua diciendo:
“Me he visto desprovista de herramientas. Creía que tras haber entrevistado a mujeres maltratadas tenía un conocimiento de lo que era la violencia de género, que simplemente bastaba con escuchar y que mi experiencia profesional me servían para dictaminar lo que pensaba y, evidentemente, he tenido que reflexionar mucho…”
“… Yo no sabía lo que era la violencia vicaria, lo que era la luz de gas, he tenido que escuchar a Ana, tenía que ver más episodios, leer, probablemente no soy lo lista que pensaba y no hablo del testimonio, hablo de una terminología que, para mí, no existía. Creía que solamente había un moratón, me he dado cuenta que no conocía el conflicto entre progenitores y adolescentes y todo eso me ha llevado, a mí, a cometer algunos errores que todavía no he solucionado”,
“Espero que me lo hayan perdonado, todavía tengo dudas y ganas de preguntar. Voy a intentar seguir aprendiendo y la única manera que he encontrado es con la humildad, pedirte mis disculpas (a Carlota Corredera, con lágrimas en los ojos) porque seguiremos discutiendo pero no te lo he puesto fácil. A veces creo que he defendido más mi ego, sin pensar en que había una tercera persona y eso me ha llevado a pasar noches en verla y a no sentirme bien conmigo misma”.