Días antes de la declaración del estado de alarma por parte del Gobierno de España, Belén Esteban decidía adelantarse y encerrarse en su casa por estar dentro del grupo de riesgo al tener diabetes.
No fue la única decisión dura que tomó, a causa del trabajo de su marido (es conductor de ambulancias), decidieron que para minimizar el riesgo de contagio Miguel Marcos volviera a vivir en su antigua casa.
Hoy por hoy Belén, es junto a Kiko Hernández, la única de los colaboradores estrellas de Sálvame que no ha vuelto a plató y continúa con su sección de recetas desde su casa. La princesa del pueblo enseña sus recetas a toda la audiencia a través de conexiones de Skype en las que le ayuda su hija Andrea Janeiro.
Andrea está pasando el duro confinamiento junto a su madre, ya que decidió volver a casa viendo que la situación estaba empeorando. Gracia a las medidas de alivio ambas han podido disfrutar de un paseo juntas que a buen seguro les ha venido muy bien tras 2 meses encerradas en casa.
A todos nos está pasando factura el coronavirus y Belén Esteban no iba a ser menos. El no poder acudir a plató ha reducido drásticamente sus ingresos, que es su mayor fuente de ingresos y no hay que olvidar que también era una fija en Sábado Deluxe que incluso se paga mejor que Sálvame diario. Pese a que las conexiones que realiza a través de videollamada son remuneradas no tienen nada que ver con la cuantía que percibe cuando acude físicamente al plató.
Según parece la intención de la tertuliana es continuar confinada en casa y no correr ningún riesgo. Y es que su intención sería seguir en cuarentena hasta que todo vuelva a la normalidad.