Después de más tres meses sin acudir al plató, trabajando desde su vivienda, la Esteban ha querido regresar por todo lo alto en el programa de los sábados, allí ha decidido contar su experiencia en el aislamiento, y no han pasado desapercibidas sus declaraciones.
La Princesa del pueblo estaba encantada con volver, pero aclaraba que:
Me habéis dado lo más grande. Ha habido cosas que no me han gustado, me han dolido. Os habéis cachondeado de mí en la sección en la cocina, no sabes lo mal que yo lo he pasado, Jorge. He llorado y he pasado muchísimos nervios. Me cabreaba porque ponía mucho de mí (….). Kiko Matamoros se ha comportado como un gallito de corral.
Con ello, Belén aprovechaba para decirles a sus compañeros un mensaje claro, ha estado fuera de las instalaciones, pero no aislada de las noticias, y sabe de todos y cada uno de los comentarios que se hacían sobre su sección culinaria.
Así mismo, habló del miedo que había sentido estos meses por ella que es diabética y su marido, que es sanitario en una ambulancia. A su parecer, el Gobierno de nuestro país no ha sido transparente con la situación sanitaria desde el principio y ha errado en muchas ocasiones. Estas declaraciones de la madre de Andrea Janeiro llevaron al presentador a pronunciarse pues, Jorge Javier cree tajantemente que el ejecutivo hizo lo que pudo y no se podía haber hecho mejor.
Ambos se enzarzaron en un rifirrafe y la cosa no finalizó bien, Vázquez acabó alzando la voz y ella al borde del llanto, precipitando que la entrevista se acortase. Como era de esperar, pues ambos tienen mucho carácter, chocaron, pero como se tienen un gran aprecio, luego la conciencia les remordía.
Finalmente fue el barcelonés quien llamó a la ex gran hermana para tomar un café y hacer las paces, arreglando la situación hasta su próximo desencuentro, pero se rumorea que habría tomado la iniciativa de no volver al programa diario hasta que las aguas estén más calmadas.